Me llamo Miguel Sancho Sanz, aunque quizás me conozcas como Migue Sancho, o “el de los poscas”. Empecé a escalar en 2010, con muchas ganas, muchísima motivación y también muchos obstáculos.
Me gustaría poder contarte que en un tiempo récord conseguí un rendimiento altísimo y me convertí en un gran escalador, pero no fue así. Tuve una progresión bastante lenta, debido a que a la vez que empecé a escalar, unos problemillas de espalda que arrastraba desde crío se fueron convirtiendo en unos problemones. Una patología congénita, que me ha provocado un gran desgaste en la columna y que me provoca un dolor con el que convivo a diario.
Te cuento esto aquí porque este hecho es quizás el detonante de que esté hoy aquí escribiendo estas palabras. Durante años compaginé mi escalada con mis estudios y posterior carrera profesional como ingeniero de caminos, en España y Australia. Sin embargo, tras unos años decidí dedicarme a la escalada, algo que me llenaba muchísimo más.
Cuando aposté por la escalada creé el podcast Rock&Joy, te invito a explorarlo… Me apasiona todo lo que está relacionado con la escalada y he tenido la suerte de poder hacerme un hueco y aprender de los mejores en muchos ámbitos de la misma. He realizado la formación pública disponible y prácticamente todas las formaciones privadas que he podido conocer. Sin embargo he aprendido mucho más trabajando con escaladores, de tú a tú.
En esta búsqueda incesante, primero por poder aportar algo de valor a la comunidad, y segundo por el prosaico arte de pagar las facturas; me he topado con el gran obstáculo de la psicología en la escalada. -El miedo, ¡ay, el miedo!- Estudiando los manuales existentes, reflexionando y con el honor de poder trabajar con escaladores que confiaban en mí, me di cuenta que los enfoques tradicionales hacia el miedo a volar se me quedaban cortos, y que los enfoques científicos que tanto resonaban conmigo, al escalador de a pie no llegaban. Creé una formación llamada Desata tu Potencial en la Roca, y estoy orgullosísimo de los resultados que mis alumnos han cosechado en la decena de ediciones que llevo. Sin embargo me daba un poco de pena que esta transformación se quedara solo en una experiencia que programo un par de veces al año.
Y así surgió este texto, una forma de poderte hacer llegar unas reflexiones que me parecen de lo más interesante si aún (permíteme la broma) no has asistido a la formación .
Este texto no es un manual, no propongo ejercicios ni dinámicas, propongo preguntas; las preguntas que me han llevado a mí hasta aquí. A cambiar de carrera profesional, de vida, a conseguir el modesto rendimiento del octavo grado pese a mis limitaciones, pero sobre todo a sacarle más partido a la escalada, a disfrutar con mayor intensidad de cada día de roca o entrenamiento encadene más o menos, me duela más o menos.